¿Suponen una amenaza para la seguridad de España los miles de inmigrantes que llegan mensualmente a Canarias a bordo de desvencijadas pateras? ¿O lo son también quienes, más numerosos aún pero menos visibles, lo hacen a través de aeropuertos y fronteras terrestres? La respuesta es que sí para un 35% de los españoles consultados por Ipsos. Y esa cifra roza el 40% entre los menores de 35 años.