Los agentes lo siguieron por la comisaría de Toledo oyendo sus ruidos mientras se movía por el conducto. Tras negociar con él y haber ocasionado «diversos daños de gran consideración», lograron que bajara por su propio pie
Los agentes lo siguieron por la comisaría de Toledo oyendo sus ruidos mientras se movía por el conducto. Tras negociar con él y haber ocasionado «diversos daños de gran consideración», lograron que bajara por su propio pie