Como siempre, alrededor de la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) hay mucho ruido pero muy pocas nueces. Después de cinco años y medio, más de 2.000 días de bloqueo, el PSOE y el PP se enfrascaron ayer en el enésimo cruce de comunicados para ver quién tiene la culpa de que no haya reuniones de negociación. Pero al margen de la batalla del relato, que probablemente incluirá alguna nueva reunión de negociación con la mediación de la Unión Europea, en La Moncloa las decisiones parecen ya listas para pasar a la acción y no esperar mucho más al PP.