La escena es la gran triunfadora de la noche, lo que no suele ser un hecho habitual, y más si el resto de los comparecientes también rayaron en sus cometidos a un nivel notable
La escena es la gran triunfadora de la noche, lo que no suele ser un hecho habitual, y más si el resto de los comparecientes también rayaron en sus cometidos a un nivel notable