Las dos primeras semanas del plenario por el asesinato del enfermero coruñés presentan un endiablado escenario para los jurados populares, que deberán aislar la actuación de cada uno de los cinco acusados para poder aflorar responsabilidades
Las dos primeras semanas del plenario por el asesinato del enfermero coruñés presentan un endiablado escenario para los jurados populares, que deberán aislar la actuación de cada uno de los cinco acusados para poder aflorar responsabilidades