Elisa (nombre ficticio) dice que cuando intenta dormir ve muertos —“¡muchos muertos!”—, gente que le pide ayuda porque se ahoga en el lodo, pero no puede sacarlos. Llora desconsolada: “¡Son muchos, son muchos!”, repite en su llanto, fundida en un abrazo con el…
Fuente: España en EL PAÍS