Las relaciones entre el PP y el PNV parecieron llegar a un punto de no retorno hace apenas dos semanas, tras un áspero rifirrafe entre Miguel Mellado y Aitor Esteban, hasta que una votación para reconocer a Edmundo González como presidente electo de Venezuela cambio la perspectiva. La posición del PNV obedecía sobre todo a factores ajenos a su relación con los populares, pero el PP logró en la votación la imagen que perseguía. Y ahora el PSOE, especialmente desde Euskadi, quiere marcar el terreno a los jeltzales.