La pareja, natural de El Salvador, abandonó el país tras las crecientes exigencias de las pandillas y la Policía, que le llevó a cumplir tres meses de cárcel por un delito del que fue absuelto
La pareja, natural de El Salvador, abandonó el país tras las crecientes exigencias de las pandillas y la Policía, que le llevó a cumplir tres meses de cárcel por un delito del que fue absuelto