El municipio granadino se vuelca los días 25 y 26 de julio en una tradición que data de finales del siglo XIX y que recrea en modo teatral la antigua lucha entre los reinos
El municipio granadino se vuelca los días 25 y 26 de julio en una tradición que data de finales del siglo XIX y que recrea en modo teatral la antigua lucha entre los reinos